Los Apus del Perú, cuyo nombre «Apus» viene de la palabra quechua apu que significa señor o señora. Son montañas que se cree tienen vida desde las épocas preincaicas. Esta creencia predomina en varios pueblos de los Andes ubicados a lo largo de Ecuador, Perú, Bolivia y Chile, a los cuales se les atribuye influencia directa sobre los ciclos vitales de la región en la que se ubican. Los Apus del Perú tienen un significado asociado a lo divino y espiritual, en algunas regiones le conocen como Huamani. De acuerdo a las antiguas leyendas preincaicas de la zona andina los Apus se encargaban de regar toda la cordillera de los Andes a cambio de la adoración de los pobladores, los valles se volvían fértiles cada vez que un Apu decidía bendecir a los locales.

Historía sobre los Apus del Perú

Los Apus del Perú también son considerados como una especie de “huaca” o santuario, pero a escala monumental están asociados a una provincia o región. En estos cerros, montañas o Apus se puede apreciar la existencia de estructuras o plataformas hechas de piedra y que sirven para llevar a cabo diversos rituales. El más conocido es aquel santuario de altura en el Aconcagua del cual se cuenta que fue uno de los más importantes desde muchos siglos atrás y en donde se realizaron sacrificios a la tierra. Algunos de estos sacrificios eran humanos y eran rituales conocidos como Capacocha.

Los Apus también pueden abarcar regiones enteras y estos llamados Apus regionales se caracterizan por su altitud o por poseer nieves permanentes, a diferencia de los apu locales, cerros, colinas o lomas. En estos últimos, en aquellos pueblos que los rodeaban se instauró la religión católica cuando llegaron los españoles, eliminando así cualquier rastro de rituales «paganos» o ceremonias impulsadas por el imaginario colectivo.

En la actualidad, las tribus peruanas del amazonas, utilizan el término “Apu” para referirse a sus líderes, a los que también se les conoce como caciques o curacas.

Existe una gran variedad de estas montañas denominadas Apus y de acuerdo con el arqueólogo Johan Reinhard en su libro “The ice maiden”, las siguientes son las mas reconocidas en el territorio sudamericano especialmente en Perú.

En esta lista los Apus, han sido ordenados de norte a sur para su mejor ubicación:

  • Sara Sara, altura de 5505 msnm
  • Sara Sara, altura de 5505 msnm.
  • Coropuna, altura de 6425 msnm.
  • Hualca Hualca, altura de 6025 msnm.
  • Ampato, altura de 6310 msnm.
  • Huarancate, altura de 5370 msnm.
  • Chachani, altura de 6075 msnm.
  • Misti, altura de 5822 msnm.
  • Ausangate, altura de 6372 msnm.

Otros Apus que se encuentran en Perú son el Allincapac con una altura de 5780 msnm, Ccarhuarazo con una altura de 5112 msnm y el Rasuwillka siendo el de menor altura con 5000 msnm.

Pero no solo en Perú se encuentran estas maravillosas y poderosas montañas, en las cordilleras de Chile y Argentina se puede encontrar algunos más de estos:

 

  • Cerro el Plomo a 5430 msnm
  • El toro a 6380 msnm.
  • Esmeralda a 950 msnm.
  • Paniri a 5946 msnm.
  • Chañi a 5896 msnm.
  • Quehuar a 6130 msnm.
  • Chuscha a 5522 msnm 

Adoración de los Apus del Perú

Luego de entender el significado de estas montañas, nace la pregunta, ¿Cómo se adoraba a los Apus del Perú? Bueno, esta respuesta se obtiene de los Incas, ellos decían que el universo estaba dividido en 3 reinos que eran el Hanan Pacha, el cual era el reino superior o reino de los dioses debido a que estos vivían en él, Kay Pacha, reino de los hombres y finalmente Uku Pacha que era el reino inferior o inframundo. Según las leyendas, las montañas se elevaban desde el Kay pacha hasta el Uku Pacha, de esta forma los Incas podían comunicarse con sus dioses y adorarlos.

Los ancestros peruanos le rendían culto a estos Apus utilizando la chicha, la cual es un licor de maíz, sebo de llama y hojas de la planta de coca. Pero no solo eran estos regalos, se sabe también de horrendos sacrificios humanos fueron llevados a cabo en los nevados mas altos de la región.

Uno de los descubrimientos más importantes ligado a estos sacrificios humanos fue el de la momia Juanita o la Dama de Ampato como también se le conoce. Esta era una niña que fue descubierta en el frío de los Andes en el año 1995, en la cima del nevado Ampato, el estado de sus restos era de gran conservación lo que permitió entender un poco más la naturaleza de los rituales.

En la actualidad, aunque el imperio de los Incas desapareció por la conquista de los españoles hace 5 siglos atrás, la tradición de venerar a los Apus aún persiste. Los nacidos en las comunidades más remotas y escondidas en los Andes y que han sido criados bajo enseñanzas andinas tradicionales aún mantienen estas creencias de la época preincaica.

Sin embargo, también se debe rescatar que las creencias ancestrales del mundo andino hoy en día conviven con las tradiciones cristianas traídas e impuestas por los españoles, por lo que no se realizan más sacrificios humanos o cualquier tipo de ritual que implique lastimar a alguien.

En la visita a Machu Picchu se puede experimentar la creencia en los Apus de las comunidades andinas. Al hacer el camino Inca que dura 4 días y 3 noches los guías turísticos te acompañarán a observar a los pobladores realizar los rituales cotidianos de adoración a los Apus. El cusco, la antigua capital Inca, está protegida según cuentan los locales por varios Apus como lo son el Ausangate y el Salkantay.